“Más que aprender inglés: una experiencia que cambió mi vida”

Carta de Enzo Toñanez

Originalmente me anoté para aprender inglés. Creía que el viaje solo me serviría para eso; sin embargo, con apenas dos meses en Irlanda descubrí que ese fue el menor de mis aprendizajes. Hoy puedo decir, sin lugar a dudas, que mi experiencia como estudiante internacional ha sido la más enriquecedora que he tenido.

Nunca salí mucho de mi país. Además de Argentina y Brasil, nunca había estado en otro lugar, y ciertamente nunca había salido del continente. Pero gracias al programa de Rockbrook pude conocer una cultura totalmente distinta. Aprendí y me maravillé con las costumbres de otro país, y ahora tengo una visión más amplia del mundo. Vi paisajes y lugares icónicos, y viví el día a día en un entorno completamente nuevo. No conocía a nadie, pero tenía la certeza de que quería seguir estando allí.

Al principio me preocupaba no tener a mi familia cerca. Nunca me había separado de ellos por tanto tiempo. Sin embargo, la experiencia que tuve —no solo con la agencia y mi colegio, sino también con toda la gente que conocí en el país— fue extremadamente cálida y acogedora. Desde el primer momento me hicieron sentir cómodo. Cuando dejé de tener miedo, pude disfrutar y comprender lo variado que es el mundo.

Expandí mi pequeña burbuja conociendo personas de muchos países. Hice muchos amigos y todos me enseñaron algo de sus tradiciones. Gracias a ello, mi visión del mundo nunca fue tan amplia.

Si algo puedo destacar de mi viaje —que aún no ha terminado— es que fue la mejor decisión que pude haber tomado en mi vida. Recomiendo a quien quiera abrir sus horizontes, pero aún tenga dudas, que se dé la oportunidad. Estas son las experiencias que se viven una sola vez y que cambian por completo tu forma de entender el mundo.

Sinceramente, no podría estar más feliz: con Rockbrook, con St. Conleth’s y con mi familia —tanto la biológica como la de intercambio— por haber hecho posible esta aventura.